Trabajando en Francia la pasé genial, lo disfruté increiblemente, vi nevar, conocí mucha gente, hice muy muy buenos amigos, comí cosas deliciosas, eclaires au chocolat y forest noire de muerte lenta... pero anhelaba al mismo tiempo volver a casa, ver a mi familia y a mis amigotes, no cubrirme con 3 capas de abrigos y comer platanitos maduros, culantro y gallopinto con tomate. Cuando se pasó el tiempo lectivo era hora de cambiar el tiquete a mi nombre y volver a mi casa y a dormir a mi cama.
Este fin de semana Felipe cambió el tiquete a su nombre. Era hora de volver a casa. Yo no lo veía desde que salimos del colegio. No eramos compas, pero él era un tipo amable, sencillo, con sonrisa sincera. Flaco, blanco, alto. Fue una muerte inesperada pero supongo que tranquila. La misa fue una misa hermosa.
Unos amigos me avisaron de la misa y el funeral cuando ya iba a almorzar. Apagué los fuegos, me cambié y me fui. Mientras me parqueaba se escuchaba detrás de los vitrales de la iglesia de Fátima: "tú eres mi hermano del alma, realmente el amigo..." Issshhh... se me encogió el corazón. No podía encontrar a mis amigos, había muchísima gente. Al final de la misa, distinguí a mi amiga y a algunos de mis excompañeros (todos caballeros altos, de negro, con los ojos llenos de agua), mientras el coro cantaba "Ya no llores por mí":
Yo te extrañare, tenlo por seguro
¿Como pensar que la vida puede terminar en un segundo?
La vida es polvo, puede esparcirse en un momento
nada trajiste, nada te llevarás
solo lo que habia dentro...
Ojalá pudiera devolver el tiempo para verte de nuevo
para darte un abrazo y nunca soltarte
mas comprendo que llegó tu tiempo
que Dios te ha llamado para estar a Su lado
así El lo quiso
pero yo nunca pensé que doliera tanto.
Ya no llores por mi.
Yo estoy en un lugar lleno de luz,
donde existe paz,
donde no hay maldad
donde puedo descansar
no llores por mi
es tan bello aqui.
Quiero que seas feliz, que te vaya bien
y cuando te toque partir espero verte aqui
"Espero verte aquí." Esa es mi fe. Eso es en lo que confío. Esa es mi esperanza. Creer en algo que no he visto, y tener la certeza de que será así. Espero de nuevo ver a la gente que ya murió. Saber que están bien. La energía ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. Confío en eso... en que no hay más dolor, ni más lágrimas, ni preocupaciones, ni relojes. Confío en volver a ver a mis amigos y a mis seres queridos. Cantar con mi Abuelita, reírme con Tito, rascarle la espalda a Marquito, hablar un buen rato sentados en una nube, volar y reirme a carcajadas con Doña Norma...
Alguien que quiero muchísimo me preguntaba: "¿Cómo haces para tener esperanza, y ser positiva, y ser feliz? Si este mundo es una mierda..." Los idiotas son más felices, de eso no hay duda. Entre más se sabe más se sufre. "¿Por qué sufre la gente buena?" "En este valle de lágrimas" como dicen las roquitas... No suelo ser siempre feliz. Soy bastante criticona. Pero sí tengo esperanza.
"No es el fin de la historia.
Son dos lados de la eternidad.
Ellos ahora se encuentran allá. "
Tengo fe no de los trillados "Cristo Vive", "Prepárate", "La segunda venida", "los tres días de oscuridad", "debó también ser bueno para estaaar con mi amorrr"... Tengo esperanza de que UN hombre pudo hacer la diferencia, pudo ser integro, pudo amar con libertad. Lo amarillista de la muerte de Jesús no es lo que me maravilla... lo que me maravilla fue su vida. Y ESO es lo que me da esperanza. Este Jesús para unos fue un profeta, para otros un hombre iluminado, un hombre ejemplar, para otros el Cristo, para otros un compa, para otros un mito, para otros un fraude. Pero de que era un tipazo, era un tipazo. El "Portento" de que las cosas pueden ser mejores. De que YO puedo ser mejor y hacer las cosas mejor.
"Yo voy al Padre para que hagan cosas aun más grandes de las que Yo hice."
Asusta saber que uno a uno mis amigos y mi familia se irán yendo. Tal vez ese egoísmo es el que le hace a uno llorar en los funerales. Mientras, igual que en Francia, guardaré bien el papel ese con mi nombre, y amaré mucho, comeré muchas cosas ricas, besaré mucho, abrazaré mucho, trabajaré MUUUUCHOO, aunque a veces canse, pintaré mucho, bailaré mucho, cantaré mucho, oiré música mucho, deseo pasear mucho, reírme mucho... Aunque haya cierta nostalgia en mi que envidia a veces a los que ya cambiaron su tiquetito y les susurraron al oído: "Bienvenido a la casa del Padre..."
